Un mundo para Greta Thunberg
Un par de semanas después de que Venezuela abriera todos los informativos, hoy cuesta encontrar una noticia breve sobre aquel país y mucho menos de Haití, que se desangra desde hace décadas y que tiene a toda la población en la calle sin que lo sepamos en el llamado mundo libre. Todo va muy deprisa y sin mesura, sin calibrar qué es importante y qué es urgente, confundiendo lo anecdótico con lo principal, agitando tormentas en vasos de agua, poniendo el grito en el cielo por unas manchas de humedad en el techo cuando por el ventanal se aproxima un tsunami que no queremos ver. Desde que la Garbo dejara los platós de cine, no había habido en Suecia otra Greta con tanta repercusión mundial como una chica de quince años apellidada Thunberg. Su discurso en la cumbre del clima de Katowice es un pelotazo en toda la cara de nuestros gobernantes mundiales, unos políticos que no vivirán en 2050, que solo están preocupados por éxitos electorales en plazos cuatrienales y a los q