30 agosto, 2013

Pintadas (26)


Esta frase atribuida a Rosa Luxemburgo estuvo durante años en una pared de Badajoz, en la Calle Héroes de Cascorro, a la vuelta del café La Tarara. Una explicación magistral de aquellos tiempos y de estos.

No hay comentarios:

Historia de la corrupción

En el colegio nos contaban los triunfos y glorias nacionales para que sintiéramos orgullo de nuestros antepasados. Rara vez había críticas...