A finales de los ochenta compartí piso de estudiante en Cáceres. En un radio-casette de coche autoreverse y con dos altavoces que se conectaban apretando hilos de cobre, escuché durante noches, sin pausa alguna, las canciones de George Moustaki. Recordarlas hoy me ha llenado de nostalgia y me ha traído momentos muy felices. Le Metèque, Ma solitude, Ma liberté, Nadjiejda, Nous sommes deux,.. algunas de ellas todavía se podían escuchar en la vieja máquina de vinilos del bar Amador. Hoy he repasado la letra de Il y avait un jardin, escrita en 1971, adelantada a su tiempo y más actual que nunca. Aquí la dejo para los que no la conocían. Au revoir, George.
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