14 agosto, 2010

Mis libros (XII)

Hoy, 14 de agosto, me acuerdo de Los girasoles ciegos. Un libro sencillo y conmovedor, pero destrozado -como tantas veces- por el cine. Sigo pensando que este país tiene que cerrar heridas y que para eso hay que abrirlas y limpiarlas bien, ahora que el tiempo ha pasado.

No digo más, que me conozco.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Quería felicitarte por tu blog y quedarme siguiéndote!
Saludos*

Historias de Loach y Laverty

Hay cine para todos los gustos. Algunos disfrutan de lo lindo con la ciencia ficción y los efectos especiales, mientras que otros nos decant...